Galería de imágenes rebosantes de luz, de color, de creatividad. Arte latinoamericano en toda su sugestiva belleza, reclamando la vida, expresándola, con su realismo ingenuo, con su toque mágico, con su movimiento y gracia.
Estas pinturas transmiten una experiencia cercana al mundo de lo cotidiano, a ese campo tan lleno de verdes, de amarillos, de azules, a esa vida tan sencilla de nuestras gentes mestizas.
La vitalidad que se percibe aquí es un don de Dios.
Estas pinturas transmiten una experiencia cercana al mundo de lo cotidiano, a ese campo tan lleno de verdes, de amarillos, de azules, a esa vida tan sencilla de nuestras gentes mestizas.
La vitalidad que se percibe aquí es un don de Dios.
Vitalidad, me encanta esta palabra para un cristiano, para una cristiana: pasión por vivir, ganas e ilusión por la mañana que comienza, esperanza en el amor de Dios, fuerza y coraje para la lucha, gozo de vivir, en medio de nuestros dolores, desconciertos, carencias.
Ese filósofo que vino a decirnos que el hombre era una pasión inútil, se equivocó de narices. Mira a tu alrededor, compadre, como la chispa de la vida está saltando de aquí para allá, mira el horizonte de luz y gloria que se nos promete, mira como la vida, aún en medio de tantas tragedias y sufrimientos, se despierta, la gente se enamora, los niños insisten en ser felices, seguimos creyendo en la amistad, y bastante gente se sacrifica por los demás, por su familia, por sus vecinos, por sus compañeros,...
Claro, todo ello tiene sentido si sintonizamos con el motor de la vida: el amor.
Que a nuestro alrededor nadie se sienta solo, ni hundido, ni perdido, ni desesperanzado, ni abandonado, ni excluido, ni rebajado, ni humillado, ni aplastado, ni.....Esta es la vida: Amarnos unos a otros, amarnos siempre, amarnos como Jesús nos ama a cada uno.
Sí, la vitalidad, una virtud cristiana para estos nuestros tiempos de capitalismos de ficción, decadentismos de torva mirada, crisis moral y económica, y soledades existenciales a la carta.
Qué el Espíritu Santo, Señor y dador de la Vida, nos convierta en hombres y mujeres, apasionados por la gracia de vivir. Amén.
Ese filósofo que vino a decirnos que el hombre era una pasión inútil, se equivocó de narices. Mira a tu alrededor, compadre, como la chispa de la vida está saltando de aquí para allá, mira el horizonte de luz y gloria que se nos promete, mira como la vida, aún en medio de tantas tragedias y sufrimientos, se despierta, la gente se enamora, los niños insisten en ser felices, seguimos creyendo en la amistad, y bastante gente se sacrifica por los demás, por su familia, por sus vecinos, por sus compañeros,...
Claro, todo ello tiene sentido si sintonizamos con el motor de la vida: el amor.
Que a nuestro alrededor nadie se sienta solo, ni hundido, ni perdido, ni desesperanzado, ni abandonado, ni excluido, ni rebajado, ni humillado, ni aplastado, ni.....Esta es la vida: Amarnos unos a otros, amarnos siempre, amarnos como Jesús nos ama a cada uno.
Sí, la vitalidad, una virtud cristiana para estos nuestros tiempos de capitalismos de ficción, decadentismos de torva mirada, crisis moral y económica, y soledades existenciales a la carta.
Qué el Espíritu Santo, Señor y dador de la Vida, nos convierta en hombres y mujeres, apasionados por la gracia de vivir. Amén.
Hola amigo me hiciste recordar a mi ciudad natal,y gracias por la vitalidad que irradias, un abrazote Venezolano !!!
ResponderEliminarEste tipo de pintura se hace sobre todo en Nicaragua y en otros lugares de Centroamérica, pero también, por lo que sé, en Venezuela: en el Zulia, en Oriente,...Coincidimos, es un arte que en su ingenuidad transmite vida y alegría de vivir. Gracias por tu amistad y tus palabras,..Marcelo
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