Entramos ya en la segunda semana de nuestro Adviento. Aquí les ofrezco un vídeo muy original para "entrar" en el corazón de este tiempo de gracia y conversión, en sintonía con la Palabra de Dios que se proclamará este próximo domingo.
Sí, porque el Reino de Dios está cerca, la apremiante invitación a convertirnos y a preparar la llegada de Cristo se dirige directamente a nosotros,... para que despertemos del sueño, nos despojemos de las actividades de las tinieblas, nos revistamos de las armas de la luz, y aguardemos la llegada del salvador como el centinela el amanecer.
La conversión es una gracia de liberación y sanación, un nuevo nacimiento, la obra del Espíritu Santo en nosotros. Su fuerza actúa y se manifiesta en la debilidad. El Señor sólo nos pide disponernos en fe a recibir su misericordia, y decidirnos, de todo corazón, a seguir sus caminos, tomando como guía el Evangelio.
Teresa de Jesús nos aconseja que tengamos una determinada determinación de seguir a Jesucristo, suceda lo que suceda, así se hunda el mundo, dejándonos la piel en nuestra decisión de decir "sí" al Señor, quien no deja de pagar, y con creces, a quien por él se decide a hacer su voluntad en todas las cosas.
La gracia de la conversión convoca nuestra esperanza. Lo que parece imposible para los hombres, es posible para Dios que puede actuar en nosotros más allá de lo que podamos pensar o desear.
En medio de nuestras luchas hemos de repetir muchas veces: "Todo lo puedo en Cristo que me conforta" (Fil 4,13)
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